Las especies más representativas del Parque Nacional Galápagos son las tortugas terrestres gigantes, las que le dan su nombre al archipiélago. Inicialmente existían 14 especies de tortugas, pero la depredación humana de la que fueron víctimas en el siglo XVIII por parte de piratas y balleneros, provocaron la extinción de 3 especies, y las constantes erupciones del volcán La Cumbre, en Fernandina acabó también con la especie de esta isla, de forma natural. La más reciente extinción y que causó consternación mundial fue la del emblemático Solitario George, único ejemplar de la especie Chelonoidis abingdonii, de la isla Pinta, que murió por causas naturales dentro de su corral, en el Centro de Crianza de Tortugas Gigantes de la isla Santa Cruz, luego de 40 años de cautiverio.